La utilización masiva de máquinas en los procesos de producción produjo una serie de transformaciones económicas y sociales que se conoce como Revolución Industrial. Aunque es más acertado hablar de «Revoluciones Industriales», normalmente este concepto hace referencia a los progresos alcanzados durante el siglo XIX y surgidos en el corazón de Inglaterra, que supusieron el paso de una economía agraria y una sociedad rural a una economía industrial y una sociedad urbana.

Revolución agrícola: sistema Norfolk

Irónicamente, el primer gran avance fue técnico, no tecnológico. Fue una idea, no una máquina, la que generó la primera revolución. Sucedió en el campo, y supuso un cambio en las formas de cultivar la tierra. La rotación de cultivos se utilizaba desde la Edad Media para ir alternando tipos de plantaciones en las parcelas y así no sobreexplotar la tierra. Sin embargo a principios del siglo XVIII, el aristócrata inglés Charles Townshend, revolucionó la agricultura con su «sistema Norfolk». Al bueno de Townshend le llamaban «Lord Turnip» («Lord Nabo»), por el interés que mostró en utilizar esta hortaliza para rotar los cultivos.

La máquina de vapor de James Watt

Aunque el escocés James Watt presentó el diseño más conocido de su máquina de vapor en 1776, en realidad siguió haciendo mejoras a su revolucionario invento hasta su muerte en 1819. Este escocés nacido en 1736 cambió la historia del mundo al mejorar la máquina de Newcomen (1712). Su máquina de vapor funcionaba de la siguiente manera:

  • El vapor caliente procedente de la caldera entra en el cilindro a través de una válvula.
  • El vapor se expande y cede parte de su energía al pistón situado en el interior del cilindro.
  • El empuje del pistón activa un mecanismo de ejes y bielas que transforman el movimiento lineal en rotatorio.
  • El vapor enfriado es expulsado a través de la válvula de salida con una presión menor que la que tenía al entrar en el cilindro.

Rápidamente la máquina de vapor se añadió a todo tipo de máquinas y vehículos. En las fábricas, la fuerza del vapor se utilizó para mover las hiladoras, telares o cardadoras. En el campo, la nueva energía se utilizó para mover arados. El transporte se hizo más rápido y barato añadiendo el invento de Watt al ferrocarril y a los barcos. Durante 150 años el vapor fue la fuente de energía más utilizada en el mundo.

Los barcos de vapor

En 1807 el estadounidense Robert Fulton abrió la primera línea comercial marítima rentable con barcos propulsados con motor de vapor, que tardaban tres veces menos que los barcos de vela en recorrer las distancias. Aun así, inicialmente los clippers siguieron predominando en el transporte marítimo, pues eran más grandes y seguros. No sería hasta 1830 cuando los barcos de vapor incorporaron cascos de hierro y comenzaron a usar hélices para propulsión. De esta manera, la navegación a vapor se hizo más segura y rápida, y desbancó a la navegación a vela.

En los grandes ríos de Estados Unidos se popularizaron los steamboats, grandes barcos para pasajeros que podían transportar a más de 500 personas e incluían salones, bares y camarotes. Famosos son los steamboats que recorrían el río Mississippi.

Hacia 1870 el primer barco con cámaras frigoríficas permitió transportar productos perecederos a grandes distancias. Otros avances, como la construcción del Canal de Suez entre el Mar Mediterráneo y el Mar Rojo en 1869 acortaron las distancias por mar. La travesía entre Londres y Bombay se acortó un 40% gracias a esta obra de ingeniería.

Un pequeño barco de vapor remolca un viejo galeón. Toda una metáfora de que los tiempos cambian.

Línea de ferrocarril Liverpool-Manchester

Viaje inaugural de la línea Liverpool-Manchester

Aunque realmente fue la línea Stockton-Darlington la primera de la historia (1825), el ferrocarril que unió Liverpool y Manchester en 1830 fue el primero en estar enteramente empujado por la fuerza del vapor en todo su recorrido. Apenas 50 kilómetros que los pasajeros podían hacer en un par de horas. Un avance épico.

La línea Liverpool-Manchester pasaría a la historia por muchos motivos. Además de no necesitar el apoyo de caballos en ningún momento del recorrido (como sí ocurría con la línea Stockton-Darlington), es decir, basado exclusivamente en la energía del vapor, fue el primer ferrocarril que tuvo un sistema de señalización, el primero con programación de salidas a tiempo completo, el primero que se usó para llevar correo y el primer ferrocarril impulsado por su propia potencia motriz. A todo esto hay que sumarle que fue la primera línea de ferrocarril de doble vía, esto es, de doble sentido. Este ferrocarril se construyó principalmente para proporcionar un transporte más rápido de materias primas, productos manufacturados y pasajeros entre el puerto de Liverpool y las fábricas de Manchester y las ciudades de alrededor.

El hierro y el acero

En el marco de la Segunda Revolución Industrial, la sustitución del carbón vegetal por el carbón mineral (o carbón de coque) permitió fundir hierro en grandes cantidades. El hierro era un material duro, inflexible y resistente a la compresión, de ahí que se utilizara para la construcción de máquinas, raíles y también para la arquitectura. Los primeros rascacielos surgirán en Chicago gracias al hierro. El material clave de la segunda fase de la Revolución Industrial se dejará ver en puentes, estaciones de tren, mercados… o en monumentos, como la Torre Eiffel. El Reino Unido se convirtió en la gran potencia global en la exportación de vigas, raíles y otras piezas de hierro. Era prácticamente el único país que vendía estos codiciados productos (que todas las demás naciones necesitaban para industrializarse).

Construcción de la Torre Eiffel en 1888, la estructura de hierro más famosa del mundo.

Descubierto en 1855, el acero (aleación de hierro con una pequeña cantidad de carbono) comienza a producirse en grandes cantidades gracias a Henry Bessemer y su famoso convertidor. Esta máquina, utilizada por su empresa Henry Bessemer & Co. en la ciudad de Sheffield (en el Norte de Inglaterra), conseguía la fabricación de acero en lingotes de buena calidad y baratos.

El acero, que hasta entonces había sido un metal muy caro de producir y sólo se utilizaba para fabricar cuchillos y otros aparatos de precisión, empezó a emplearse en grandes industrias como la naval, para revestir los cascos de acorazados o submarinos.

Posibles preguntas para el examen

Posible pregunta 1

Explica el funcionamiento de la máquina de vapor de James Watt.

Posible pregunta 2

¿A qué máquinas y vehículos se añadió la máquina de vapor? ¿Qué se consiguió con ello?

Posible pregunta 3

Explica en qué consistía el sistema Norfolk.

Posible pregunta 4

¿Por qué ha pasado a la historia la línea de ferrocarril entre Liverpool y Manchester?